El Poder


El poder nunca cambia de bando 
aunque lo parezca,
permanece impertérrito fiel a su bandera,
aunque no la tenga. 
El poder es un mal milagro 
deseado y concedido a quien mal desea.
Supera con creces las expectativas 
de todos nuestros demonios
y ese Dios que inventa para su pecado,
lo absuelve mientras al resto nos condena.
El poder se alimenta de hambres y de esperas
desesperadas y sangrientas,
hace cielo lo más bajo que puede
y en esta altura de hondos agujeros,
se yergue victorioso 
como una virgen tras un parto doloroso 
lleno de ausencias.
El poder se hace arteria cada vez que lo piensas
y bombea una sangre espesa y virulenta
que lo ensombrece todo,
vistiendo el horizonte de estrellas engañosas
que oscurecen el planeta.
No lo siente como suyo, el planeta,
pues nada tiene mas allá de las quimeras que gobierna,
con ellas domina el corazón que no tiene.
al que no llega
y hace mente en el espacio hueco de lo que se sueña
y no suele "soñarse" la concordia normalmente.
Hay un yo gigantesco en el que poder se crece,
ahí está su bando, 
esta probablemente sea su bandera.
Y sin embargo, 
solo este yo puede destruirlo
porque el poder en el fondo lo desprecia.

A.M.G (2016)

Comentarios

  1. Entiendo que el poder no es malo en sí, son las personas que hacen mal uso de èl las que hacen que sea algo negativo a vista de la mayoría. Buen poema. Saludos.

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    1. Gracias por tu mirada.
      El poder solo tiene un uso, doblegar...un saludo

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  2. Un poema lleno de sentimiento, anabel. Creo que el deseo de poder alimenta lo más oscuro del alma humano cuando no persigue ningún fin altruista.

    Además de unos versos hermosos, nos das motivo para la reflexión :)

    ¡Besos de sábado!

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    1. Gracias por detenerte en mis letras desde la letras mismas... un abrazo

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